Agentes biológicos y químicos en la guerra: conociéndolos y reconociéndolos para una adecuada intervención en salud
La guerra biológica se refiere al uso de agentes microbiológicos y químicos con fines hostiles. Dicho uso está prohibido por el derecho internacional, pero ha vuelto a ser de actualidad debido a su uso en la guerra de Ucrania.
La principal preocupación es el uso de agentes biológicos como armas de guerra por parte de grupos terroristas y ejércitos sin escrúpulos
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han creado una lista de prioridades para agentes biológicos y toxinas (ver tabla Agentes biológicos y toxinas de alta prioridad según los CDC).
Los agentes de mayor prioridad pertenecen a la categoría A.
El uso deliberado de agentes de guerra biológica para causar bajas masivas probablemente implicaría la propagación de aerosoles para infectar a través de la inhalación y, por lo tanto, el ántrax y la peste neumónica son las 2 enfermedades más probables de ocurrir en estas circunstancias.
Reconocimiento de agentes químicos y biológicos
Puede ser difícil distinguir el uso de un agente de guerra biológica de un brote natural de la enfermedad.
Las pistas sobre el origen intencional en lugar del natural de un brote de enfermedad incluyen las siguientes:
- Casos de enfermedad que no se observan con frecuencia en un área geográfica dada
- Distribución inusual de casos entre segmentos de la población
- Tasas de incidencia significativamente diferentes entre los que están dentro y fuera de los edificios.
- Brotes separados en áreas geográficamente no contiguas
- Múltiples brotes simultáneos o en serie de diferentes enfermedades en la misma población
- Vías inusuales de exposición (p. ej., inhalación)
- Zoonosis que ocurren en humanos más que en animales
- Zoonosis que ocurren primero en humanos y luego en sus vectores típicos
- Zoonosis que ocurren en un área con baja prevalencia del vector típico de la enfermedad
- Gravedad inusual de la enfermedad
- Cepas poco comunes de agentes infecciosos
- Falta de respuesta a la terapia estándar
La investigación epidemiológica de los casos y la cooperación con las fuerzas del orden son esenciales, al igual que la comunicación de riesgos al público.
La manifestación clínica, el diagnóstico y el tratamiento de pacientes con enfermedades causadas por agentes de guerra biológica de alto riesgo incluyen los siguientes agentes: ántrax, peste, viruela, tularemia y fiebres hemorrágicas virales.
El manejo de los brotes causados por agentes de guerra biológica no difiere del de los brotes naturales, excepto que los médicos deben estar preparados para manifestaciones inusuales de resistencia a los antibióticos.
Puede ser necesario el aislamiento (de los pacientes) y la cuarentena (de quienes han estado en contacto con los pacientes).
Las enfermedades de diseminación deliberada más contagiosas son la viruela (para la que se requieren precauciones respiratorias) y la peste neumónica (que requiere precauciones contra los aerosoles).
Respuesta sanitaria a los agentes químicos y biológicos utilizados en la guerra
Debido a los períodos de incubación relativamente largos de las enfermedades causadas por agentes de guerra biológica, la mayoría de las vidas se salvarán o se perderán en entornos hospitalarios.
Se necesitan suministros suficientes de vacunas, antibióticos y antivirales para los pacientes hospitalizados y quienes han estado en contacto con ellos, y son cruciales los sistemas para distribuir estas contramedidas médicas a las personas de la población general con alto riesgo de exposición.
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